Monday, March 22, 2010

Forever is a Long, Long Time/ Para siempre, es mucho tiempo

Alguna vez te jure amor eterno y “para siempre” no parecía tanto tiempo, nos amábamos y queríamos vivir juntos toda la vida.

Fue un sábado, ya lo había decidido, el domingo sería el gran día. Cumplíamos cinco años y diez meses de relación; setenta meses después de que nuestros labios sellaron nuestro primer beso, te pediría que fueras mi esposa, por fin podría despertar junto a ti todas las mañanas.

A las cinco de la tarde fui a una de esas tiendas Bizarro a recoger nuestro anillo de compromiso. Tuve que descalabrar al banco para poder costearlo, pero eso y más hubieran valido la pena, estaba contento, no cabía de alegría, así que fui a casa de Alejandro para presumirle la sortija.

Alex y Karla, su esposa estaban muy contentos, al fin otro de los muchachos se uniría al grupo de los casados, Alex me convenció de salir con el resto de los muchachos a una pre-despedida de soltero, finalmente era mi último día sin estar comprometido. Te mande un mensaje diciéndote que saldría con ellos y que nos veríamos por la mañana para ir a desayunar, no tenias ni idea de lo que te esperaba.

Luego de cinco jarras de cerveza, por ahí de las dos de la mañana, decidí que había sido suficiente para mí por esa noche. Los muchachos se quedaron a seguir la fiesta y yo me subí al carro y conduje por toda la calle de Madero. Todo fue muy rápido, acepto que me pase el alto y que no vi venir la camioneta, recuerdo haber volteado a ver al conductor, intercambiamos miradas y vi su rostro asustado; De verdad espero que mis ojos no lo atormenten por el resto de sus días. El golpe fue preciso y directo en el costado derecho, lo suficientemente bien colocado como para hacerme perder el control del carro, trate de recuperarlo pero solo un poste de luz pudo poner fin a mi camino.

Recuerdo haber despertado en la camilla mientras los paramédicos buscaban mi cartera, solo sentí como sacaban el anillo de mi bolsillo, pero no pude articular palabras, me faltaban fuerzas y sabía que el fin estaba muy cerca, pensé en lo mucho que me había faltado por vivir, en lo mucho que te quise y en que no te lo dije lo suficiente, en lo triste que estarías al enterarte de la noticia y que jamás podrías conocer el anillo que tenía para ti, trataba de seguir consciente, pero cada vez se volvía más y más difícil, mi último pensamiento indudablemente fue para ti – Ni modo Gloria, no hubo “para siempre”-.

Wednesday, March 10, 2010

Today your love, tomorrow the world…

El mundo. Mi mundo, hoy.

Y mordía una manzana cuando me recordaron los chicles con sabor casi interminable. Mi mirada quedó fija al escuchar aquello. Chicles con sabor casi interminable... Y el crack en el corazón no se pudo evitar. Lo escucho, lo siento, cambio de tema y casi de inmediato vuelvo a darle cuerda al reloj de mi vida. Ric ric. Once vueltas serán suficientes -pensé-, lo hice lo más rápido que pude, y sin embargo siguió parado…
Veintiséis vueltas más para hacerlo funcionar de manera regular…

Hoy me doy cuenta que ni el pasado ni los recuerdos pueden dejarse en los sueños o guardados en el cajón. El mundo sigue su curso pero a mí alguien me recuerda los chicles con sabor casi interminable y el reloj que le da cuerda a mi vida se congela. Hoy tu esencia es sólo un recuerdo y pese a ello, mi caminata no cesa. Camino impregnada de saudade, saudade de la piel, del olor, de los besos. Saudade de la presencia, y de la ausencia consentida, poco importa lo que piense, lo que sienta, las decisiones que haya tomado esta semana y hasta lo que digan los demás, tú sigues siendo eso, mi ausencia consentida…

Sunday, March 7, 2010

Today your love, tomorrow the world

Somos tercos: hemos leído ya a Romeo y Julieta, visto a Jack y Rose, llorado con infinidad de parejas malogradas en el mundo literario-cinematográfico y no entendemos el hecho de que jamás es sano entregarse a una persona al 100% Tomamos todo como una señal para embelesarnos, y le decimos adiós a la lógica cerebral. Ese pequeño músculo sanguinoliento se apodera de nosotros y somos caso perdido: Un coma romántico. La vida es rosa. Dedicamos horas enteras a aquella persona que nos tiene en las nubes y de pronto te cae como balde de agua fría la noticia de que todo terminó ¿Y qué haces? Lloras, lloras y lloras como idiota porque no te diste cuenta, porque las señales estaban ahí. Pero ¡No! Si volviésemos a pasar por lo mismo, repetiríamos la historia, el amor es una cosa demasiado bonita, tanto, que estamos dispuestos a soportar cualquier tipo de hiel con tal de probar la miel por breve que sea el saber de ésta.
Cuando eso me sucede a mí, me dan ganas de largarme a otra parte del mundo, no ser yo, al menos no para los demás. ¿Podría irme a China? Reinventarme, decir que me llamo Minerva y no Adriana, que soy pendejamente feliz y que estoy escribiendo un libro de Tin Tan. Suena bien ¿No? Pero es imposible, humanamente imposible, Adrianamente imposible, ¿A qué me voy, cómo, cuándo y para qué? Las cosas tiene que mejorar, y si no lo hacen, la curiosidad me mantendrá aquí... Creo. Lo agradezco de todas formas, aunque el amor sea palpable y el mundo no. Primero fuiste tú, ya vendrán las ciudades, pues no podemos huir de nosotros mismos, pero tampoco es viable regresar al amor y aparentemente el mundo tiene que esperar. ¿Nos volamos la tapa de los sesos? 

Thursday, March 4, 2010

Today your love, tomorrow the world/ Hoy, el mundo

Hoy, me encuentro posteando desde la ciudad de Monterrey en el estado de Nuevo León, a la fecha ya es uno de los lugares en donde más tiempo he dormido. La ciudad tiene enormes dimensiones y sigue en crecimiento. Nadie jamás podrá desbancar a la ciudad de México, pero este lugar tiene lo suyo. La gente no sabe manejar y estoy seguro que el índice de accidentes es muy elevado, empieza a volverse cotidiano el oír decir "ocupar" en lugar de "necesitar", las cosas aquí están con madre, poco a poco Monterrey se ha ido ganando mi corazón.

Hace ya casi dos años me encontraba en Chicopee, Massachussets, el sol se empezaba a ocultar y yo iba caminando a media carretera hacía el hotel en donde estaba hospedado, pensando que el mundo es un lugar muy grande y pequeño a la vez.

En el país del norte, solo en Los Ángeles me he sentido a gusto, hace casi un año me paseaba por sus calles, asombrado de como otra ciudad puede ser tan cosmopolita como en la ciudad de México, no por nada es la segunda ciudad con mas mexicanos después del chilango. Los Angeles tiene todo para atraer a cualquier tipo de persona, pero si algo debo agradecerle es que me dio la esperanza de creer que puedo ser feliz en otro lugar aparte del D.F.

En mi mundo, las distancias son pequeñas; Un día puedes estar navegando en alta mar y al día siguiente estas en tu casa viendo el fútbol y a veces en vez de recordar algún destino turístico, me recuerdo desayunando en un restaurante o caminando hacía el auto, cuestión de enfoques supongo o cuestión de vivir quizás.

son de mar

Siempre he pensado que amar con arrebato es algo que en algún momento de la quebradiza existenciade alguna persona, puede llevar a hacer cosas que uno nunca se imaginó hacer jamás.



He cruzado todos los oceanos de este mundo para saber que no puedo vivir sin ti